Por fin, El Rio y yo, hemos podido coincidir después de una temporada de trabajo dura, la cual no ha acabado, no se si decir por suerte o desgracia. El destino elegido fué el desfiladero de los beyos para barranquear, algo que me vino bien, ya que hasta ahora no he parado de escalar y tanto entrenamiento necesita un descanso. El barranco elegido fué la Foz de Tolivia, barranco muy bonito y que llebabamos mucho tiempo con ganas de hacer. Al final, tras una larga y calurosa aproximación, llegamos a el magico pueblo en ruinas de Tolivia donde comenzamos el rio.
Al principio se trata de una canal - riega seca y bastante tomada, para dar paso a una parte muy bonita y ya encajonada seca, que tras un rápel nos deposita en una importante surgencia que es la que alimenta el rio de agua y donde comienza la zona mas bonita.
Tras un breve descenso, llegamos a el riu mohizu, el cual iba bastante bajo, lo que no quita mencionar su belleza, especialmente a la altura de una impresionante bóveda poco antes de llegar a el rio sella, el cual, no hace falta de cruzar!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario