Un día antes de este importante cambio, pudimos aprovechar y de nuevo, gozar de un día espectacular en el Desfiladero del Cares, recorriendo uno de los caminos ancestrales mas importantes de la garganta, claro está antes de la construcción del canal y senda actual.
Pese que ya hay ganas de escalar y empezar a entrenar, algo que tengo olvidado por completo tras un otoño/invierno dedicado casi en exclusiva, a recorrer y descubrir caminos antiguos de pastores. Tan solo la apertura de la via "ARDO" en Tielve y días contados de deportiva, hicieron posible ponerse un arnés fuera del ámbito laboral claro.
Como para cada cosa hay un momento y motivación, pudimos aprovechar unos meses de buen tiempo e increíbles condiciones, para recorrer este tipo de caminos. Lo peor son las escasas horas de luz, pero no se puede tener todo! Ahora y pese las heladas, la hierba esta seca y la vegetación baja.
Volvemos entonces al Cares a pasar en esta ocasión, un día "tranquilo" recorriendo sedos y caminos antiguos de pastores. Digo tranquilo teniendo en cuenta nuestras últimas visitas al Cares y las zonas tan expuestas que recorrimos.
En esta ocasión y tras las "bajas" de Eduardo y Diego, una pena ya que la idea era salir todos juntos.... nos juntamos mi sobrino Alejandro, Alberto Tapia y yo. La idea era hacer algo bonito y no muy largo en el Cares.
Pese a que por ganas hubiese elegido otro itinerario mas técnico y menos conocido teniendo en cuenta la visita de Alberto Tapia, gran conocedor y "explorador" del Dobra entre otros lugares, y escalador que domina como nadie este tipo de terrenos. Decidí "enseñarle" a él y mi sobrino, uno de los caminos mas importantes, ancestrales y estratégicos del Cares, que comunicaba el pueblo de Caín con la canal de Trea y garganta del Cares, antes de disponer de la senda actual. A su vez también y en especial para mi sobrino, disfrutamos de varios caminos y zonas, que mis abuelos, padre y tíos, recorrieron durante muchos años de su vida pastoreando y elaborando queso entre tierras Cainejas y Onienses.
Salimos de Poncebos, y nuestro primer objetivo sería la canal de Trea. Continuando la senda inferior del Cares para variar decidimos acceder a la senda superior por un sedo muy bonito y que no mucha gente conoce, el sedo de la canal del Molín. Además de su belleza, quizás sea una de las maneras mas rápidas de acceder a la senda y con menor desnivel.
Progresamos por el sedo con vistas 5 estrellas sobre la canal de Estorez. Aprovecho para explicarle a Alberto y mi sobrino futuras rutas y zonas de sedos y armaduras poco conocidas. Entre ellos, destaca como no el camín de Treslloru. Desde el sedo de la canal del Molin, tenemos una panorámica in mejorable de la zona conocida como el "Gavitu" donde está uno de los pasos claves o mejor dicho escalada, para poder acceder a la "Cualadrona" y "Dureyu" directamente desde el rio Cares o desde la canal de Estorez.
Tras disfrutar del sedo, accedemos a la senda superior del Cares justo donde empieza la canal del Saigu, y estaba el antiguo bar "el espejismo". Tocaba caminar ya por terreno completamente llano y cómodo hasta la entrada de la canal de Trea.Estamos en la entrada a la canal de Trea, y nuestro siguiente objetivo sería el Collado del Torno tras cruzar el monte los Plagamones.
Poco a poco vamos superando la entrada a la canal de Trea. La clave ahora es encontrar la entrada o camino hacia el Collado el Torno cruzando el monte los Plagamones. La referencia mas importante es el primer encajonamiento de la Canal de Trea, unos metros antes de llegar a la fuente "El Peyu".
Sin ser muy visible el camino, cruzaremos la riega "seca" de la canal de Trea justo por "debajo" de los primeros contra fuertes rocosos que veremos a nuestra izquierda según subimos (derecha orográfica), los cuales forman parte del primer encajonamiento de la canal a modo de "foz". Los primeros metros del camino están algo cerrados por la vegetación.
En pocos minutos encontramos ya restos de camino y algún que otro "hito", que manteniendo la altura y sin a penas subir mucho, nos conducen sin pérdida alguna al Collau el Torno. La mayor parte del camino está bastante pisada y visible.
Llegamos al Collau el Torno, y empezamos a disfrutar del sol y las vistas. Aún lado tenemos toda la canal de Trea, Los Hedranos, el cuetu Lluengu, Cantu Cerezales, Cuetu la Requexada entre otros... y al lado contrario, un sin fin de canales y paredes que dan comienzo al macizo central de los Picos desde el Cares. Sin duda el collau el Tornu es un lugar para visitar!!
Del collau el Tornu, tenemos que bajar continuando el camino por una vertical pero fácil canal donde nos encontraremos una curiosa portilla, como siempre respetarla y cerrarla!. Esto es lo que se conoce como Callejo el Torno.
Tras la Portilla, encontraremos la entrada o final de la canal de la Teja que asciende desde la senda del Cares hasta "nuestro" camino.
De nuevo las vistas son impresionantes y mejoran a cada metro. Nuestro objetivo ahora es el travieso la Bersolina, que encontramos sin pérdida alguna ascendiendo ahora por el evidente sendero hasta un pequeño collado.
Desde el collado, ya es visible el Travieso la Bersolina. El travieso la Bersolina es un pequeño paso estrecho armado que se supera sin ninguna complicación. El travieso regala a la vista una de las tantas armaduras o construcciones que pastores locales hacían para facilitar el paso o ganar en comodidad y seguridad.
De nuevo, paramos a disfrutar de las vistas y "enseñar" otros caminos perdidos del Cares a Alberto y mi sobrino Alejandro. Creo que Tanto mi sobrino como Alberto, tienen ya unos cuantos deberes en el Cares!!
Tras descender y superar el Travieso de la Bersolina, nos encontraremos con un sedo horizontal que salva la zona conocida como las Canales en su parte superior. Esto se conoce como la Bersolina y sin duda tiene ambiente, pese a que se cruza sin problema alguno.Superamos la Bersolina y ya es visible el siguiente collado, Hierbas Altas.
Que decir delas vistas de Hierbas Altas.... impresionantes!! entre las muchas cosas bonitas que podemos ver, se distingue con mucha claridad nuestro siguiente objetivo, el "Seu la Vara".
Toca descender hacia la riega las Hojas,. Ántes de llegar a ésta y continuar así el camino normal hacia Caín pasando por las "Boas", tendremos que desviarnos hacia la derecha en busca de la entrada del "Seu la Vara" metros mas arriba.
Aunque el "Seu la Vara" es muy evidente, ya que sin duda es el único paso evidente a la parte superior de la riega las Hojas, una pared negra con columnas es sin duda la mejor referencia. Aún así, no es difícil ver restos de camino que nos conducen sin pérdida alguna hacia la entrada.
En el "Seu la Vara" se ha puesto un cable, que la verdad mas que ayudar molesta. Nosotros no lo utilizamos y el anclaje al cual está sujeto pues.... Bajo mi punto de vista, el paso es mas incómodo o difícil utilizando el cable que sin utilizarlo. Quizás ayude mas para bajar que para subir.
Tras superar el Sedo, tenemos que atravesar la pendiente ladera que cae hacia la riega las Hojas. Sin ser muy difícil, hay que ir con cuidado ya que un fallo te conduce directamente al fondo de la riega. No es difícil pero sin duda hay que ir bien atento y concentrado.
Tras cruzar la ladera, toca ascender por una zona de hierba muy resbaladiza hasta lo que se conoce como Cueva la Vara, un pequeño paré que sirve de refugio al ganado. En esta zona es donde por así decirlo, nace la riega las Hojas donde nos encontraremos con el resto de un gran cauce "seco" y muy escavado tras la desembocadura del barranco o canal "Burdiu las Bolugas", que tuve la suerte y el placer de explorar hace ya unos años, con un salto cercano a los 200 metros de vertical. Barranco fósil claramente formado que cae de manera directa y vertiginosa de la zona conocida como el Gorbizu.
Tras superar el cauce seco y estar al bajo del último rapel del barranco "Burdiu las Bolugas", nos encontraremos con un pequeño resalte, donde es habitual encontrar un gran nevero.
Este nevero y dependiendo de su dimensión y altura, nos ayuda o no a subir el siguiente tramo. En esta ocasión no encontramos el nevero, y optamos por trepar por una canal de roca y hierba con un paso muy gracioso. Este paso se puede evitar yendo mas por la izquierda en un "largo" rodeo.
Superamos el resalte, y estamos en un pequeño bosque donde de nuevo las vistas del central son espectaculares. Toca subir y pese a que es terreno relativamente sencillo, no fue nada cómodo debido a la hierba que resbalada mucho. Poco a poco ascendimos con un inusual calor, demasiado para ésta época del año, hacia la Ganzaba.
Desde la Ganzaba, descendimos un poco por terreno franco para posteriormente sin perder altura, ir hacia unas canales muy evidentes y aparentemente sencillas de atravesar. Nuestra idea ahora es ir hacia la mayada de Oliseda.
Atrás dejamos un pequeño collado y la Ganzaba. El central como no de fondo!
Un cauce seco de piedra es muy buena referencia, y ayuda a subir frente a hacerlo por zonas herbosas. En esta zona se puede ir "por cualquier lado", pero está claro que la roca ayuda mas que la arguma o hierba.
El tramo entre la Ganzaba y Oliseda no es que digamos el mas bonito ni cómodo. Pese a ello, también tiene su punto de interés y belleza gracias a las espectaculares vistas y millones de encuadres.
A medida que subimos y antes de llegar a Oliseda, podemos ver el Jultayu, Cuvicente y su espectacular furacau... el "ojo" del Jultayu también es visible aunque mas difícil por sus escasas dimensiones.
Un pequeño collado, y por fin vemos Oliseda!
Pese a que la idea era subir hacia el Jultayu, bajamos como no a Oliseda y que mis compañeros puedan conocer lo que sin duda, fue un lugar de vida y trabajo muy importante para mis abuelos paternos.
Oliseda sin duda es una de las mayadas mas precarias y salvajes de Picos. Para mi sin duda es un lugar mas que especial junto a la Vega de Ariu.
Aquí pastoreaban mis abuelos Leoncia y Cirilo. Según me contó mi padre, estuvieron tres temporadas viviendo allí durante los meses de verano y otoño. La primera vez, mi padre tenía 4 años, mi tio Ramón 3, y mi tia Eloina 2. Subían desde Caín por los "sedos de Oliseda".
A mi tia Eloina, la subían en un zurrón. Mientras que a mi tio Ramón, lo tenía que atar en los tramos mas difíciles de los sedos de Olisdea. Mi padre siendo el mas mayor de los tres, era un poco mas autónomo. INCREÍBLE!!! esto sin duda si que eran hazañas....
En Oliseda, se refugiaban en un paré rojizo, donde "muriaban" con piedras y colocaban tablones en forma de tejas para resguardarse, sin ni si quiera ser una cabaña como tal. Yo flipé mientras mi padre me lo contaba. Puesto que estuve allí, realmente me parece tan asombroso como duro e inimaginable.
En Oliseda hay una fuente. La pipeta de la fuente es el cañón de una escopeta, que mi guelu Cirilo puso, y gracias a ello es posible conseguir agua sin que se pierda entre las grietas de la roca.
Cosas de la vida, un nietu y bisnietu visitan juntos una de las tantas majadas y casas que mis abuelos y padre tuvieron. Ésta hace ya mas de 70 años....
Tras dejar Oliseda, nuestro siguiente objetivo era la Vega de Ariu.
Continuando un poco con uno de los tantos caminos que recorrieron nuestros guelos y antepasados, accediendo al que sin duda fue el hogar durante muchos años de mis abuelos, padre y tios, la vega de Ariu.
Desde Olisdea, hay tres maneras de acceder a la Vega de Ariu.
La mas larga y "descansada" es por el "Hoón de Oliseda". Ésta es interesante si decidimos ir hacia Vegarredonda o la zona de la Peña Blanca, Robliza o Verdilluenta por ejemplo... además de la Vega de Ariu.
La mas directa y sencilla, es la que asciende de manera directa desde Oliseda, para pasar entre el Jultayu y Cuvicente. Se pasa muy cerca de un gran y espectacular Juracau y no presenta dificultad alguna. Esta fue nuestra elección ya que sin duda era la mas utilizada por nuestros ante pasados y pese a que yo había ya pasado por allí varias veces, quería que tanto mi sobrino como Alberto la conociesen.
La tercera opción, y que sin duda es la menos conocida y arriesgada, es por el Gorbizu. Esta subida aún no la conozco y sin duda es una de mis cuentas pendientes. Según me contaron en Caín, era uno de los pasos mas frecuentados de mi abuelo Cirilo, el cual usaba tanto para ir a la Vega de Ariu como para acceder a la parte alta de la canal de Trea de manera mas rápida y directa. Este paso es otro de los grandes desconocidos del Cares.
Seguimos con nuestra ruta, y mucho antes de lo que esperamos estamos ya en la horcada que separa el Jultayu del Cuvicente.
Cambiamos de vertiente y abandonamos el sol por la sobra. Toca abrigarse tras un cambio térmico radical, y pisar nieve.
Desde el Collado, tratamos de mantener la altura para coger el camino que baja del Jultayu hacia la vega de Ariu. No fue nada fácil debido a la nieve, que en ciertos tramos estaba bastante dura. Ahora cambiamos la vista del central por la del occidental y la parte Cabraliega del mismo.
Sin duda la Vega de Ariu y el Jultayu, son quizás uno de los mejores miradores de Picos, Cordillera y porque no Pais!.
De paso, paramos a contemplar futuros proyectos.... no solo de sedos o pasos, sino de tapias también!
Inmejorable panorámica de la salida de la canal de Piedra Bellida
Y como no, Cabeza Llambria y las "Traviesas de Lechadorio"
Primeras cabañas de Ariu, una de ellas la de mis guelos. Estamos ya en la vega de Ariu y nuestro siguiente destino sería, el Cantón del Texeu.
La idea de acabar en el Cantón del Texeu, fue para que tanto mi sobrino como Alberto, conociesen el puertu de Onis. Sin duda lo lógico y por otro lado muy interesante, hubiese sido descender los sedos de Oliseda desde Oliseda hasta Caín.
Dejaremos los sedos de Olisdea para otra ocasión que mi sobrino o Alberto puedan venir, ya que aún quedan muchas cosas por conocer en esos lares, una de ellas el Gorbizu.
Desde la Vega de Ariu, tomamos el camino tradicional del puertu de Onis. De la Vega de Ariu, pasamos las Abedulas, Reblagas, Redondiella, Cueña Mala (encima de la Redondiella) Llomba Belbín, Vega las Mantegas y por fin el Cantón del Texeu!.
Muchas gracias a don Tito Rojo por recogernos en el cantón del Texeu, que como siempre, paramos en Bobia donde nos tratan como en casa o mejor!. Allí nos reunimos también con Eduardo Díaz que por desgracia no pudo venir y que nos acercaría a Poncebos.
Como curiosidad y anécdota, me impresiona la capacidad de diseño y ejecución por parte de los responsables, de la pista recién abierta entre el Cantón del Texéu y la Vega mas Mantegas. ¿De verdad que por ahí pasa un coche?
Un viaje de vuestra mano a los lugares menos conocidos ( que no menos vividos). Un placer, como siempre
ResponderEliminarMuchas gracias Monchu! sin duda es increíble todo lo vivido allí arriba... y todas las historias que seguro se perderán! es una pena porque sin duda esta es la historia real de Picos y Cordillera. Muchas gracias como siempre por tus aportaciones!
EliminarBuenas Victor, solo comentarte que descubrí tu página hace poco gracias a Alberto Tapia, con quién tuve la suerte de compartir alguna jornada de montaña. Darte las gracias por la publicación de estos magníficos reportajes, tan poco habituales y precisamente por ello, tan apreciados. Esos sedos pastoriles son increibles y una muestra de la dureza de los paisanos de otru tiempu. Entiendo que Oliseda sea tan especial para ti. Para mi lo es Ariu o Camplengu Dubia, ya que mi padre es natural de la Robellada. siempre que voy por allí intento enseñarle las fotos y contarle por donde pasé. El paisano ya no está para subir hasta allí, pero le presta por la vida ver las fotos de lugares que recorrió en otros tiempos.
ResponderEliminarLo dicho un saludo y a ver si consigo copiarte algún recorrido (de los menos expuestos en todo caso).
Un saludo
Muy buenas Cienfuegos! Creo que conozco tu blog del cual creo recordar soy seguidor!. Un placer y me alegra conocer gente que comparte esta aficion e interes tan particular, ademas de la cual se puede aprender mucho.
EliminarOjala un dia pudiesemos compartir un dia de montaña juntos! Es mas, ya que Alberto Tapia tiene ganas, si lo ves apropiado un dia salimos los tres y algun amigo mas, para que conozcais uno de los rincones mas bellos del Cares, y menos conocido....la huerta Ancuevas!
Lo dicho, un saludu y gracias por tus palabras!
Por cierto, mi madre ye de la Robellada, de los Martinez!
Pues gracias por el ofrecimiento, aunque entrte lo que suele hacer Alberto y lo que te veo aquí a ti, miedo me dais, ja, ja. Y que casualidad que tu madre sea también de la Robellada. Mi padre es los Villa, pero ya marcharon todos los hermanos de allí va muchísmimos años.
EliminarUn saludo
Hola Víctor y seguidores.
ResponderEliminarCuando leí la primera entrada de la serie de re-descubrimientos de caminos viejos del Cares, anunciado que habría más viajes de esos por adelante, estaba ansiosa de leer tus perspectivas tan contempladas. De como los paisanos han explorado su tierra, mejorando pasos, construyendo cobijos, pasando por arriba y por allá buscando pastos por sus animales, igual perdidos o heridos... Abajo la Ruta de fácil consumo.
Es un viaje en el tiempo, es el lugar del último gran glaciar de Asturias, es enseñanza de supervivencia en tiempos pasados- pero son tiempos siempre actuales. De las vistas y la profundidad al desfiladero se sueña, por suerte las fotos trasmiten y dejan vivir las sensaciones.
Muchas gracias por dejarnos vivir nuestro mundo de una perspectiva poca repetible por pisamontes regulares, y por expresar por fin la convivencia de las generaciones que han pasado por tal belleza, buscándose la vida.
Muy buenos dias Xuan. Pues. Muchas gracias por tus palabras! A mi es un tema que me apasiona, y como siempre digo, lo mas bonito que tenemos en nuestros picos es la historia, y esta la han escrito los pastores. Lo malo es que la estamos perdiendo en favor de otras, que no nos representan. El cares como otros desfiladeros de la cordillera, esconde muchos secretos, muchos aun por descubrir por alguien ajeno al pastoreo. Asi que eso tratamos d hacer, y contar! Un abrazo
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar