La vida es la ostia!
Quien me iba a decir que tras anular un día de trabajo por culpa de las malas previsiones meteorológicas, y ver como amanecía soleado y sin plan alguno, se iba a convertir en uno de los mejores días de mi vida como montañero.
Un poco frustrado por no poder trabajar cuando al final el día se presenta ideal y soleado. Sobre todo cuando encima no se te ocurre la manera de al menos aprovecharlo, bien sea caminando o escalando, y mas aún cuando ni si quiera puedes cuadrar con ningún amigo o compañero, con lo que me quedaba ir solo al monte.
Por otro lado ni si quiera podía madrugar, ya que tenía que llevar a mi hijo Julen a las 10:00 de la mañana a un campamento, con lo que no era la mejor hora para salir al monte a hacer alguna actividad larga.
Muchos son los planes que se me pasaron por la cabeza, claro está solo. Como no hay mal que por bien no venga, y eso que estoy en un momento de mi vida muy bueno y feliz, si que necesitaba desconectar un poco de la vida, el ruido y la gente. A veces es tan bueno como necesario.
Si hay una actividad que me reporta soledad, silencio y sobre todo sentir al máximo nuestras montañas, eso son los caminos y sedos perdidos que tenemos en nuestros montes y desfiladeros. Mi preferido como no es el Cares, así que para allá que me fui.
¿Lograr silencio y soledad en el Cares? parece muy difícil, pero para nada imposible.
Varios son los planes que tengo en la cabeza desde hace tiempo para poco a poco seguir conociendo todos los rincones del Cares, o al menos los que a mi me de tiempo en la siempre corta vida que tenemos. Ya que iba solo, estaba claro no me la iba a jugar mucho, aunque es algo que todos sabemos es difícil de controlar o predecir, ya que hay momentos donde la motivación e ilusión se ante ponen a la lógica y la cordura.
Mi idea inicial era visitar la canal de Sollambrio y Cerezales. Tenía ganas de hacer un recorrido circular gracias a la travesina Táranos que comunicaba ambas canales en su parte media - superior. De paso y ya que comenzaría ascendiendo la canal de Sollambrio, pues intentar localizar el paso del "Llambrio" que comunicaba ésta canal con el valle el Enguergo y el Celloso.
Para nada se me había pasado por la cabeza intentar el paso del "Llambrio" yo solo y sin tener referencia alguna del mismo, tan solo unas pocas indicaciones de Tino el de Culiembru que por otro lado, siempre me insistió que no fuese debido a su peligro. Según el hacía falta el uso de cuerda. Mi idea era verlo, localizarlo y así volver junto como a Eduardo Díaz e intentarlo.
Sin duda para mi, Tino es una de las grandes referencias del Cares y los sedos "imposibles". Recuerdo el día que fuimos al Celloso y las traviesas de Lechadorio, donde Tino nos dijo que no era muy malo, pero que sin embargo el "Llambrio" era una locura.
Recuerdo en mi memoria como si fuese ayer, el momento de cruzar las traviesas de Lechadorio en un atardecer tan bonito como tétrico. Si para Tino estas traviesas no eran muy malas y el "Llambrio" era una locura, no me quería ni imaginar su dificultad y exposición.
Camino antiguo desde la canal del Escaleru hacia la senda, metros antes de llegar a la entrada del Saigu |
En este punto el camino antiguo sube hacia la derecha y por encima de la senda, cruza la canal del Saigu, Avareras y un buen tramo mas adelante baja de nuevo a la senda por un bonito sedo escalonado antes de llegar a la Viña, donde continuaría unos metros por la senda hasta llegar a la Riega la Paloma.
Desde Culiembru podemos seguir por la senda o por la ladera a la izquierda de la misma ya cayendo al Cares, hasta unos metros antes de la pasarela de los hermanos Martinez, donde saltaremos el talud de la senda, para descender unos metros por una zona de piedras y hierba hacia el rio en busca de un impresionante escaleru que baja hacia el río, pasando por debajo de dicha pasarela.
Comenzando el escaleru de la "Huertona". Al fondo (esquina izq superior) se ve la continuación por el sedo |
Esta zona se conoce como la "Huertona" y es francamente impresionante y discreta. Desde aquí, seguiremos otro corto escaleru y un bonito sedo hasta enlazar con la senda unos metros antes de la Riega las Párvolas.
Escaleru de la "Huertona" comenzando el sedo estrecho |
Los últimos metros para acceder a la senda desde el sedo son un poco delicados.
Frontera entre Asturias y Leon. Para mi no deja de ser una misma montaña, Los Picos de Europa |
Estoy en la entrada de la canal de Sollambrio y el sol comenzaba a pegar de lo lindo. Hasta en dos ocasiones me planteé la retirada debido a las altas temperaturas y humedad.
Estaba claro que la subida de Sollambrio era dura y con calor, pues podría ser interminable. No se si por necedad o sin mas ganas de estar en el monte, decidí seguir.
Túneles tan característicos de la llegada a la canal de Sollambrio. Un mundo entre Asturias y León |
Comienzo la canal y como puedo, utilizo los árboles para refugiarme del sol. Sin camino cómodo y con algún que otro pedrero, asciendo despacio planteándome a cada poco la retirada. Llevaba bastante agua pero el sol era por momentos insoportable.
Comenzando la canal de Sollambrio |
A los pocos metros de ascenso y algo que sin duda llevaba en la cabeza desde que salí, intento fijarme en el lado derecho según subo (izquierda orográfica de la canal) para intentar ver por donde podría estar el paso del "Llambrio" insisto sin referencia alguna.
De repente veo lo que parece ser una gran vira herbosa que parecía tener continuidad hacia una llambria de roca no muy vertical, que comunicaba dicha vira con una zona ya mas abierta y sencilla. Esta zona aparentemente sencilla y sin ver mucho mas, parecía ser un paso natural hacia el Valle el Enguergo, aunque este tipo de terrenos siempre esconden alguna sorpresa.
Vira superior donde pare a beber y comer algo. Vista estupenda del paso del Llambrio, que parece mas facil de lo que es, para variar.... |
Pese a que no era la idea, vi tan claro que eso pudiese ser el "Llambrio" que decidí ir a echar un ojo. Asciendo por terreno ya vertical utilizando la roca todo lo que puedo y viendo lo que parecía ser rastro de sendero y piedras pisadas. A veces es muy diferente lo que ves de lo que tu cabeza quiere ver, con lo que me decanté con lo que mi cabeza quería creer, y ascendí tan motivado como ilusionado creyendo que iba por buen camino.
Llego a la gran Vira Herbosa, una especie de hombro donde de nuevo me refugio debajo de un gran árbol. Aprovecho para beber algo y comer un plátano justo antes de asomarme. No se porqué pero de alguna manera estaba nervioso, tenía miedo de verlo factible e intentar hacerlo. Casi prefería verlo mal y volver otro día con Eduardo.
Cruzo toda la vira y sorpresa! la vira no comunica con dicha llambria. Un salto de unos 15 metros de roca vertical e infranqueable hace que esté tan cerca como lejos de la llambria. Me fijo y veo que bajo mis pies y al pié de la pared que forma dicho salto, hay otra gran vira que si comunica con la Llambria.
Vira inferior antes de comenzar la trepada y parte clave del día |
Busco la manera de poder bajar a la Vira. Retrocedo unos metros y logro encontrar una zona no muy difícil para destrepar, eso si vertical y con una caída ya importante. Tras destrepar unos 10 metros verticales, veo lo que parece ser un sedo que me comunica con la citada vira inferior.
Cruzo la vira y por referencias de Tino, parece que estoy bajo el paso del "Llambrio"!!!
El tema se presentaba interesante.
Vista de la canal de Sollambrio y el paso del Llambrio desde la canal de Ria. |
Una especie de talud de roca y hierba completamente vertical y de unos 8 metros, me separan de la llambria. Siempre pensé que el paso clave era la propia llambria, con lo que este resalte fue sin duda una sorpresa inesperada. Por una lado, veo una especie de canaleta muy vertical con bastantes arboles, sin duda el punto mas débil para acceder a la Llambria.
Decido por curiosidad intentar subir un poco a ver como era. Empiezo a trepar, y los árboles me cierran el paso siendo muy incómodo pasar y por momentos hasta me tiraban para atrás como si fuese un desplome. Por la izquierda y ya en pared, veo una zona con buen canto y aunque menos evidente, decido trepar por ella como si de una vía de IV+ se tratase hasta que logro ponerme encima de los árboles y al pié de la llambria.
El Llambrio |
En ese momento veía bastante factible poder bajar por donde subí, algo sin duda a tener siempre en cuenta. En caso de caída estaba claro sería fatal, pero al menos los buenos agarres de roca me daban la tranquilidad de que a lo que me agarrase no se iba a ir o romper y podría bajarme sin "problemas".
La llambria no parecía difícil pero estaba claro que no había oportunidad a fallar. Cada vez la altura era mas considerable y sobre todo cuando hablamos de travesías, parece que aumenta aún mas.
Tras unos minutos pensando que hacer, decido ya de estar allí y verlo tan cerca, continuar. Comienzo una travesía de izquierda a derecha al principio completamente en horizontal, y después ascendente. Cantos de roca, ramas, algo de hierba y muy buena roca hace que sean mis únicos recursos para poder avanzar. En un punto de lo que se podría definir como no retorno, me encuentro con el paso mas psicológico. Sólo tres metros me separaban de la zona sencilla que veía desde abajo. Que cerca estaba de lograr conseguir lo que para mi era un sueño. Un sueño de muchos años, y que parecía desvanecerse cada vea que hablaba con Tino.
Tras coger aire y tomar la decisión final, toca fiarse de la adherencia de la roca. Mis manos sudaban y claro no tenia magnesio. Mis botas eran lo que habitualmente son los pies de gato en una llambria como esa. Por supuesto, no había cuerda, arnés ni nada parecido. Ni para subir o para bajar en caso de fracaso. A mi me gusta hacerlo así, y todas las opciones son respetables, para mi lo importante es hacerlo con humildad y sin ventaja alguna respecto a los pastores de antaño.
Tres movimientos de pies y manos sobre adherencias mas típicas de un IV+ clásico de la este del Picu, y estaba fuera de la llambria!!
Canal de la Raiz, Sedo Inabio y el Pandu Culiembru |
Por un momento me apetecía gritar, pero era realista y aún no sabía si realmente ese era el paso y si tendría salida al valle el Enguergo. Tiro la mochila al suelo y camino rápido hasta doblar la esquina y empezar a ver cagadas de cabras. Tras las cagadas empiezo a ver roca pisada, y en pocos metros doy vista al valle el Enguergo.
No os podéis imaginar el momento de felicidad. No me lo podía creer. Sin duda uno de los momentos mas bonitos e importantes en mi vida como montañero. Por fin lograba hacer algo que cada día parecía mas inalcanzable. Como no, grité de alegría! total allí nadie me escucharía.
Entrando al Valle L`Enguergo |
Estoy en el valle el Enguergo y sigo sin creerme lo que hice. Ahora tocaba regresar a casa y pese a que me planteé subir hasta el Jorcau el Olisu y hacer de nuevo las traviesas de Lechadorio, decidí bajar al Cares para volver pronto a casa y así aprovechar la tarde con mi hijo Julen.
Huerta Ancuevas |
Dos opciones de vuelta. O por el Celloso o por el Cerroso. Decido bajar por el Cerroso ya que la última vez que estuve allí había ido por el Celloso. Asciendo todo el valle L´Enguergo donde a penas veo camino y la vegetación hace muy incómodo la ascensión. El calor seguía castigando y por momentos era insoportable debido también a la vegetación.
Cueto Palombo |
Tras ascender el valle, llego a la colladina donde me uno al camino del Cerroso que sube desde Culiembru hacia el conocido monte las Muyeres.
Disfrutando de las vistas desde la "Colladina". A la derecha el Valle el Enguergo, y a mi izquierda la bajada hacia el Cerroso. En frete un mundo de canales y sedos alucinantes |
Unas fotos y empiezo la que sin duda fué la parte mas incómoda del día. Bajar el Cerroso es tan incómodo como peligroso. Incómodo por la vegetación y peligroso por la cantidad de agujeros que la caliza esconde bajo la vegetación y donde es muy fácil meter un pié y romperlo. Descenso muy lento y tedioso.
Comenzando el descenso del Cerroso |
Poco a poco voy perdiendo altura y llego a la zona donde se accede al Celloso. Allí el terreno mejora y por momentos veo sendero, además de ser terreno ya muy conocido. En pocos mintuos llego a Culiembru y me voy de cabeza a la fuente.
Culiembro y la senda desde el Cerroso |
Tras refrescarme y beber, empiezo a progresar por la senda con una felicidad inmensa. Tras llegar a la subida hacia los collados, bajo por el "escaleru" hacia la senda de abajo, y de ésta al coche. En total 5 horas de actividad para un recorrido realmente alucinante.
Canal de Culiembro desde la bajada del Cerroso |
Como siempre, no publicaré reseña ni croquis del recorrido clave para evitar responsabilidades, por eso no puse foto de la zona vista desde la propia canal de Sollambrio, ni de la entrada a la parte clave pese a que es evidente.
Se que todos somos adultos, pero no me gustaría dar pié a que nadie que no conozco, a que intente este paso, bien sea porque meta seguros o anclajes ajenos a lo que hay y siempre hubo (como ya ha pasado hace años), como a que no le pase nada a nadie, que al fin y al cabo es lo mas importante. Si cito esto es porque está pasando, e insisto, la idea no es crear una moda ni nada por el estilo. Sin mas es algo que nos gusta y de paso documentamos a modo personal.
La Viña, camino de vuelta a Poncebos |
Tan sólo decidí poner nombres y lugares característicos para documentar la zona. Hay muchos amigos, compañeros y montañeros que incluso no conozco en persona (pero se de sus andanzas.... ) que están sobradamente preparados para ir. A ellos y como siempre, no me importará compartir cierta información por privado.
Estaría bien que cuando logremos hacer algo, nos acordemos de las personas que nos han ayudado e informado, ya que a veces sin esas ayudas..... pero sobre todo, ser tan generoso con los demás como lo son con nosotros cuando nos comparten información y ayuda. Por ello y como siempre, el que la necesite ya sabe donde estoy!
Dar las gracias no sólo a Tino el de Culiembru por las escasas indicaciones que nos dio, sino también a J.W que estuvo por la zona y algo me contó. Todo suma!
De nuevo, mucho respeto a esta gente (pastores). Increíble lo que hacían y por donde cruzaban. Una vez mas la historia me ha demostrado que no somos nada!. Unos titanes de la vida!
Increible recordar viejos tiempos,tuve el privilegio de hacer el recorrido a la inversa con tino llevando una cuerda para rapelar la trepada que tu hiciste y recuerdo dejar un cordino en un puente de roca pero eso fue hace veinte años.Presente recordaba la armadura que alli hubo cuando ella era joven.Felicidades por la activdad
ResponderEliminarHola Jorge! Antes de nada encantado y gracias por participar en el blog. Que sorpresa que conozcas el paso y a ver si un dia nos conocemos y me cuentas algo! Ya que es u o de los pasos olvidados del Cares y del que menos info hay. Sabes como era la armadura? Me alegro que tengas el placee de haber pasado por alli! Muy pocas personas lo han hecho. Un abrazo y muchisimas gracias!
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