Si de algo había ganas y necesidad, era de salir al monte con amigos y explorar.
Cosas de la vida, la última actividad que hice con amigos antes del encierro en el mes de marzo, fue un sedo y día de exploración junto a dos buenos amigos y compañeros. Ahora "post" cuarentena y fuera del ámbito laboral, la primera actividad que puedo hacer comparte los dos mismos factores.
Difícil explicar en un sólo "post", todo lo que encontramos y disfrutamos en esta salida. Innumerables armaduras, calzadas, restos de antigua vida que como postre, nos regaló un "nuevo" itinerario muy peligroso que hasta la fecha, tan sólo el pastor Cabraliego Bernardo Mier, había recorrido.
El primero objetivo del día, sería la majada de Dureyu, cuyo recorrido desde el puente la Jaya en Poncebos, ya es de sobra conocido. Como matiz, destacar que cada día se ve menos el rastro de este camino ancestral, ¡que pena!
Desde Dureyu, subiríamos a la "Cueladrona", cueva habitada por Guillermina "la de Bulnes" y cuyo camino habitual, es el de la armadura de Castiellu. Ya que uno de nuestros compañeros conocía otra manera de subir, la cual teníamos pendiente, pues decidimos probar suerte por la zona conocida o perdón desconocida, llamada "Tresabrosos".
Desde Dureyu, cogemos un camino de cabras bien pisado que de manera horizontal, va aguas arriba.
Decir, que hay otro camino que baja hacia el río, el cual ya recorrimos en la "super travesía" inédita que hicimos hace un par de años hasta la canal de Estorez. Hoy el objetivo sería parecido, pero radicalmente opuesto ya que lo haríamos, por la parte o conexión mas alta.
A nuestro camino y como se puede ver en la foto superior e inferior, vemos varias armaduras y calzadas que marcan bien el "camino".
No quiero marcar línea ni nada parecido, para evitar "problemas" en especial ahora.
Nuestro objetivo sería encontrar la armadura de "Tresabrosos", la cual a modo de sedo "talllado" y armado, nos permitirá subir poco a poco por un terreno de huertas y espolones muy verticales, hacía el "Jorao".
Las vistas del Cares ¡espectaculares!
Si, ese camino también es el Cares.
Pronto llegamos a la armadura de "Tresabrosos".
Sedo estrecho, armado y en donde tuvieron necesidad de tallar la pared, para que no "te echara" afuera". una pasada.
Tras la armadura, una trepada en roca de nuevo por repisas talladas de muy buen agarre, donde a nuestras espaldas podemos ver todo el farallón del Paré Angobeyos.
También tenemos encuadres de esos únicos, de partes del canal que nunca se ven...
Otra vista de los Collaos...
La zona de Tresabrosos, es una zona de grandes huertas y buenos pastos para las cabras, de ahí que exista ésta subida y la tuvieran tan "preparada".
Aunque no lo parezca, el terreno es bastante empinado...
Tras unas trepadas, llegamos a las cercanías del Jorao, unión con el camino que sube de Dureyu donde ésta piedra tan característica, nos recibe con el habitual equilibrio.
poco me costó convencer a Alberto para que se subiera en ella... eso si, con cuidado que su base es estrecha y minúscula, aún no se como puede mantenerse en pié.
Desde el Jorao, seguimos el camino hacia la cueva de "Cueladrona".
Como referencia, tenemos una torre que creo la llaman "el castilllo", donde podemos ver de fondo la larga y empinada canal de Llamero.
Que decir d "Cueladrona"...
Inimaginable la vida de Guillermina allí. Podremos escuchar todas sus historias, pero otra cosa es ir allí e imaginártelas.
Su entrada está completamente tomada por las ortigas y vegetación, pero dentro aún esconde uno de esos tesoros que presta encontrar.
Un madero tallado para recoger el agua que cae del techo. Un bebedero perfecto para las vacas y demás ganado, y de paso su particular fuente. Nosotros por supuesto, probamos el agua y con el calor que hacía, la "Cueladrona" nos dio un respiro salvador.
Tras una parada en "Cueladrona" comenzaba el "día de verdad", es decir, terreno desconocido, salvaje y sin saber si realmente podríamos cumplir nuestro objetivo, para mi lo mas bonito de éstas cosas, cada vez menos valorado y practicado.
Para situarnos, pongo una reseña de donde estamos y que pretendemos hacer, sin dar muchas referencias ya que es una zona altamente peligrosa si no se va con el nivel suficiente. Cuando hablo de nivel, no hablo de grados de escalada.
Hablo de saber pisar, que roca o canto agarrar, trepar o des trepar tranquilo con caídas mortales, etc... se que alguno se reirá, pero bueno, todo es cuestión de ignorancia.
Nuestro objetivo es buscar un punto débil y accesible, de toda la arista que separa la zona de "Cueladrona" con la canal de Estorez. (Muchísimo mas bajo, está el paso del "Gavitu")
La dificultad radica en, que al otro lado de ésta arista y ya hacia Estorez, "cae" un paredón de varios cientos de metros verticales e incluso desplomados.
Por supuesto, éste paso nos lo dijo su autor, el gran Bernardo Mier en una de las tantas veces que hablamos con el. Como suele ser habitual y muestra de que su armario de ropa es muy extenso o no, la entrada a ésta difícil bajada la marcan unos trapos y camisetas, que colocaba para que las cabras no entrasen.
La clave ahora era pasar dos espolones previos a la arista, intentando no bajar mucho para luego subir. Por sorpresa, nos vamos encontrando sedos y pasos muy guapos con el camino "bien" pisado.
En la foto superior se ve el paso del primer espolón, con el cual flipamos.
Pero si ese paso fue bonito, el del segundo espolón (foto inferior) lo superó con creces, al encontrarnos piedras apiladas entre un muro y las raíces de un árbol, por terreno muy vertical y que te depositaban en una traviesa ya fácil, pero aérea.
Seguimos por terreno fácil, eso si muy cerrado de argaña, y llegamos a la arista donde inevitablemente lo primero que hicimos fue asomarnos.
Creerme, ese lugar "acojona"...
No se si es el ambiente, la altura o el paisaje, pero pocos lugares podemos encontrar en la zona con tal abismo. Solo pensar bajar por ahi, que no es igual que subir, y "echar el culo atrás", daba un poco de rollo jaja.
Recorremos la arista que aunque íbamos "a tiro fijo" con una buena y clara referencia, vemos el "jito" o marca clave de la zona donde empezaba la supuesta bajada, los trapos de Bernardo con la canal de Estorez de fondo.
Una parada para beber, comer algo y comenzamos a bajar.
Decir que no hicimos muchas fotos debido a lo vertical y expuesto del terreno, pero alguna salió.
El descenso consistió básicamente en des trepes delicados enlazando un sistema de viras en un largo e intrigante recorrido zigzagueante donde a cada paso, no se veía muy bien el siguiente y tan solo podías percibir el vacío que teníamos bajo los pies.
Realmente es un recorrido muy entretenido y como se suele decir, audaz. Es impensable creer que una zona como ésta exista en un mundo de paredes verticales. Si decidimos bajarlo fue porque Bernardo así nos aconsejó, debido a que de subida, era mas fácil perderse.
Perderse allí puede tener consecuencias muy graves.
Aquí vemos a Alberto en la traviesa final que nos conduce a la canal de Estorez.
Una vez en la canal de Estorez, tan felices como alucinados de por donde habíamos bajado, descendimos hacia las "Reondas" de Estorez para cruza el río, apetecía bañarse... y volver al coche mas que contentos!
Para rematar el día y ya que desde la zona de las "Reondas" de Estorez solo hay dos opciones de subida a la senda Cares, o bien por "Cuarmada" (Cueva armada) o bien por la canal del Molín.
Como atajo y era otro paso pendiente, logramos conectar la parte baja de la canal del Molín con la parte baja del sedo de la canal del Molín, con loq eu sería lo mas parecido a conectar la canal del Molín con la senda de abajo del Cares, pocos metros por encima del rio, pero sin mojarse claro jeje.
Atajo importante pero, muy expuesto.
Otro gran día que culminamos como antes, en la terraza de un bar disfrutando de nuestra gloria particular, las mas importante claro, y continuando admirando lo que pastores como Bernardo eran capaces de hacer, por "unas cabras".
Espero os guste y hasta otra! de nuevo lo mejor, la compañía.
Precioso al igual que jodido Vìctor, un saludo para tì y tu compañero Alberto.
ResponderEliminarMuchas gracias! La verdad es que visitamos lugares preciosos, pero alguno de ellos tiene su precio... Era increíble por donde se metían... Un saludo!!! Rutas por el paraíso
EliminarNose que pensará la gente sobre este deportes desde mi perspectiva me daría miedo practicarlos pero admiro mucho a la gente que lo hace moldes de inyección de plástico es a eso a lo que te refieres?
ResponderEliminarQue tal Aurora, gracias por participar. No entendi lo de los moldes de inyección de plastico...
EliminarImpresionante trabajo de investigación esa comunicación de Cueladrona con Estorez, hay que tener mucho temple para acometer las rutas que hacéis. Me gustan estos recorridos de investigación y llevo años recorriéndolos, pero la mayoría de los vuestros superan mi limite.
ResponderEliminarUna vez conseguí cruzar desde las Redondas a la parte inferior del Sedo de la canal del Molin, trepando unos 4 metros y llegando a una losa casi horizontal con una pequeña roca triangular como clavada, pero no parece el mismo sitio que el de tu reportaje, esto es un ahorro de tiempo y desnivel muy importante, pues vas en horizontal, aunque al salir de las Redondas te toca bregar con la maleza. Después un paisano me comento que por esa losa bajaban y subían con un palo, pero desconozco que tipo de palo.
Hay otra subida desde las Redondas siguiendo el rio a la izq. y subiendo por una canal más a la izq. de Cuarmada, que termina en un sedin llegando a la Senda, por aquí no tocas maleza, pero da mucha vuelta comparado con la salida del reportaje.