Uno de los últimos caminos de pastores que he recorrido en solitario que mas me han gustado, decir que aunque no hay que relajarse no es satánico, es el que hice hace unos meses desde Poncebos, al Cdo Caranera pasando por la Cueva de Riba (Cueva de arriba) y luego, en un recorrido realmente precioso, ir hacia el Jorcáu y de ahí, bajar por la Armadura y canal de Castiellu a Dureyu para volver a Poncebos.
Bueno, este sería el recorrido circular "ideal", para mi fué un día mucho mas largo ya que antes de bajar a Dureyu, fui hacia la majada de Castiellu para asomarme a los desventíos que caen al Cares, y hacer unas fotos de todas las paredes de Angobeyos para la guía de escalada de Aventura en Cabrales.
El trabajo bien hecho, siempre cuesta! y el día fue largo, muy largo! aquí dejo una primera reseña del recorrido circular, donde en amarillo marco el camino de conexión entre Dureyu y la Cueva de Riba.
Mas adelante, veréis otra reseña desde otra perspectiva a cerca de la parte alta del recorrido, donde se diferencia mejor el perfil de la Morra Caranera.
Desde el Poncebos, salí por el precioso y tristemente cada día mas perdido, camino hacia Dureyu. Es una pena un camino tan importante en su día y a ojos del montañero tan bonito, desaparezca de esta manera.
¿Os imagináis que los ayuntamientos mandasen una cuadrilla de operarios un par de veces al año a limpiar y mantener, caminos tan importantes, accesibles y cercanos al coche como este? ¡Buen chiste chaval!
El caso es, que el primer objetivo y antes de llegar a Dureyu, es una canal estrecha con pedrero que te conduce directamente hacia la Cueva de Riba. Decir que tambien podríamos ir por la ladera de su izquierda, a día de hoy muy tomada por la argaña.
Desde la parte media de la canal, podemos ver ya la cueva de Riba.
Si hay algo que me gusta de estos recorridos, es encontrar restos que si te paras un poco a pensar y abres los ojos, te cuentan como ha sido la vida aquí, vida que dios quiera como decía mi padre o abuelo no vuelva, pero que no debemos olvidar.
Nuestra raza y origen viene de lugares como éstos, para mi, gran orgullo y mas valioso, que venir de un palacio.
Por la derecha de la cueva, viene un precioso camino de conexión entre ésta y la majada de Dureyu.
¿Lo apreciáis en la foto?
Venga, una foto mas de cerca donde incluso se ve una pequeña calzada o armadura para reforzar el camino.
Aquí la prueba de la calzada... ¡ingenieros sin estudios!
Sigo subiendo y aparecen mas cuevas en el lado derecho.
Ahora el objetivo es bordear por la izquuerda la Morra Caranera y buscar el camino para acceder a su collado, el Collado Caranera.
Tras una subida fácil, comienzan las trepadas no muy difíciles, sobre roca, argaña y vegetación varia, siempre siguiendo la mejor señalización de estos "caminos" como son las con perdón, cagadas de cabras.
Si alguien te pregunta que has hecho hoy en el monte, se resumiría a eso, a seguir cagadas de cabra.
En la foto (inferior) podemos ver la Morra Caranera y a su izquierda, el Collado Caranera. Para acceder a su base, hay que subir primero por el lado izquierdo y luego bajar, para por el centro y debajo del Collado, encontrar los famosos trapos de Bernardo que te marcan la subida, o en el caso de ser una cabra, la dirección prohibida.
Estoy justo debajo o al pie, de la trepada hacia el Collado Caranera. Echo la vista atrás (foto inferior) y puedo ver en su parte superior una gran vira herbosa, a la cual accedí primero, para luego bajar por una ladera herbosa hasta donde me encuentro.
Para subir a dicha vira, se aprecia una canal estrecha y vertical herbosa, justo debajo de la misma con un arbolito en medio. Lo ideal sería haber cruzado directamente hasta donde estoy, pero en la foto no se aprecia un resalte de roca muy liso.
Estoy al pie de un muro de roca y hierba, que aunque aparentemente se ve factible, es vertical. Lo primero que veo es, esta joya, una serie de piedras empotradas y colocadas a modo de escalón.
Alzo la vista arriba y ¡Bingo! un trapo de Bernardo, voy por el buen camino...
Con que poco nos conformamos a veces, que una de las mejores sensaciones es, ver un trapo viejo colgando de la peña o de algún arbol.
"Los Trapos de Bernardo" podría ser el título de una buena película... ¡de terror!
La razón de colocar un trapo, no es otra que de alguna manera poner una señal a las cabras de, prohibido pasar. Dependiendo de las necesidades de Bernardo, los quita y pone, o sin mas, los deja en un lugar siempre fijos.
Para nosotros son, las mejores señales de que vamos por el "buen camino".
Lo que mas em gusta de estos caminos es, de como un lugar tan visitado y conocido como es la senda del cares, puedas verlo desde otras perspectivas.
Bueno, hasta aquí sin ser fácil tampoco, el recorrido era bastante claro y no muy expuesto.
Ahora toca la parte clave y menos conocida, muy probablemente, a penas se conozca (yo solo conozco a uno) montañero que haya pasado antes por aquí. Decir, que sabía de éste recorrido tras hablar con diferentes pastores de otras cosas, y por casualidad contar que por aquí, Bernardo también pasaba...
Desde el Cdo Caranera, iremos a media ladera aguas arriba entre roca y argaña. El objetivo es continuar hasta donde la ladera cae de manera vertical a una canal muy angosta, que sirve de desague justo en el punto, donde debajo se encuentra la conocida armadura de Castiellu.
¿Habrá paso por ahi arriba? lo cierto es, que mires por donde lo mires, parece imposible.
Tras cruzar la media ladera, encuentro un precioso sedo que de manera zigzagueante y para ir con mucho cuidado, baja hacia dicha canal por una zona que ni te lo crees...
En la canal, pues si miras arriba ves grandes paredes muy verticales, que dan hasta miedo...
Si miras abajo, pues un arroyo seco vertical que se dirige hacia una "escupidera" la cual y unos cuantos metros mas abajo, te dejaría por así decirlo, en la Armadura de Castiellu, mejor no comprobarlo...
Subo la canal y de repente, diviso lo que parece ser un paso de esos que "dios puso a posta" para poder salir de un lugar que si no encuentras la salida, podría parecerse a algo como el infierno.
Yo ya, no salgo de mi asombro, no se si por los caprichos de la geología, o por el trabajo y audacia de los pastores.
Trepo por roca pisada y puedo decir, que esto es un sedo en toda regla...
Estoy en una gran traviesa, que cuando estudié el terreno era un lugar clave, y echo la mirada atrás para ver por donde baje de la media ladera del Collado Caranera, hacia la canal angosta.
En la foto inferior e intentando utilizar la lógica, veréis claramente por donde bajé... siempre divisando pequeños tramos de sedo y como no, cagadas de cabras.
Ahora la cuestión, sería salir de ésta vira hacia una zona superior, aparentemente mas sencilla y que seguro, me sacaría ya a terreno conocido en las cercanías del Jorcau.
Sobre la vira, se levanta una franja de roca de unos 6 metros de altura que recorre la misma. Solo tengo que encontrar una debilidad o por donde trepar, claro está, lo ideal sería ir por donde Bernardo iba con lo que antes de precipitarme y tirar a escalar, buscaría la zona mas lógica, dentro de algo tan ilógico.
Tras buscar, encuentro un árbol y una debilidad, con roca pisada, o eso creía creer mi cabeza.
Un pasito a bloque (jajaja!!!) y estoy en terreno que aunque aun hay que agarrarse a la argaña y vegetación, poco a poco me deriva en el gran "hito" que Bernardo ha puesto para que a ninguna cabra se le ocurra, bajar por allí.
Tras el trapo y aunque ya estaba tranquilo por la zona en la que me encontraba, veo la lápida del burgalés Angel Enciso, fallecido en 1932 en esta zona
Ahora, solo me quedaba ir hacia la majada de Castiellu y de ahí, y sin camino y entre riscos, hacer una buena sesión de foso para la guía, antes de volver por el Jorcau a Dureyu y de ahí al coche.
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