Ya que no hay dos sin tres, volvemos a la Peña el Escobal apurando los últimos días del año y un brutal anticiclón que tras días de sol, secó por completo esta pared.
Esta vez tocó visitar la pared con un gran amgigo y compañero de oficio, Pablo Alonso de "Liébana Aventura". Pese a que tenemos una imponente y dura vía por acabar en el desfiladero de la Hermida, cosas de la vida nunca abrimos una vía juntos, o mejor dicho ya que la anterior citada está en proceso, nunca completamos una apertura juntos.
Aunque los dos primeros largos los abrí en solitario días atrás, aproveche el tiempo en familia para escaparme a la carreta y subir un petate de material mientras la autora del nombre de la vía, mi hija Jimena, hacía la digestión en su habitual siesta.
Recordad, si véis una mochila en la base de la pared llena de cosas o de aspecto muyy pesado, no la toquéis, nadie en su sano juício olvidaría tal armatroste alli, pero mucho menos, ¡bebáis el agua!... una larga historia de explicar, muy probablemente por ignorancia aunque casi nos estropea el día.
Sin mas dilaciones, aquí va la reseña de una nueva criatura donde de nuevo la roca y escalada es 5 estrellas, eso si, tras un poco de limpieza donde ha quedado fetén. Que los grados no lleven a engaño, solo reflejan la dificultad en libre.
El primer largo con un puente de roca en los primeros metros marcando su inicio, es un precioso y fácil largo de canalizos perfectos y profundos.
Tiene dos chapas que se añadieron no sólo para guiar, sino para no hacer un free solo así ya para calentar.
Tras éste y en una reunión sobre una gran terraza de hierba, tendremos un segundo largo precioso y ya mas difícil y vertical.
Tiene un poco de todo, placa, diedro, bavaresa, muro tieso... ¡una preciosidad! donde de nuevo la reunión a encontraremos en una gran terraza de hierba
El tercer largo, sale en travesía hacia la izquierda sobre una terraza de hierba, para pronto montarnos en un muro precioso y siguiendo la tónica de los largos anteriores, roca espectacular.
Un largo de moverse, con algún pasito muy fino y como no, obligado. Tiene algún tramo donde los seguros alejan y hay que templar los nervios ya que en todo momento hablamos de una escalada fina de pies. Como siempre digo, con las chapas puestas ¡es mas fácil! largo 5 estrellas.
El siguiente largo, el cuarto, es otro largazo de escalada preciosa y elegante. De nuevo los pies serán claves.
Sale hacia la izquierda por una zona que ya límpia, es una gozada. La parte clave y donde conviene reservar friends pequeños, es una fisura - bavaresa muy muy bonita. La entrada a la misma es espectacular, por un tramo muy vertical de muy buen canto, como a veces digo, eso estaba ahí para escalarse.
El último largo es ora maravilla, este realmente nos sorprendió ya que no teníamos nada de fé en si se podría superar decentemente, un pequeño techo.
Sale por una zona con fisuras para en la primera chapa, irnos a izquierdas por una preciosa placa de goteros y regletas. Luego, supera un pequeño techo con pasos muy bonitos y sobre buen canto (hay que buscarlo...)
Tras ésto, nos montamos en una placa fisurada tremenda, donde un puente de roca nos guiará hacia los metros finales, donde tendremos algún pasito fino/tonto sobre friends.
Resumiendo, otra joya y otro día maravilloso junto a un gran amigo, ¡muchas gracias Pablín! que sigamos con estos buenos hábitos que a poder ser, sean mas a menudo.
Así queda tras esta vía, la Peña el Escobal.
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